Reflexiones Semanales del 12 de Marzo de 2023
REFLEXIÓN SOBRE: ¿POR QUÉ LA PENITENCIA?
3/11-12/23 TERCER DOMINGO DE CUARESMA
En al menos dos ocasiones, el Antiguo Testamento nos dice que David, un hombre conforme al corazón de Dios, cometió pecado (2 Sam.11: 26-27; 12: 7-23; y 24: 18-25). En ambas ocasiones, David admitió su culpa ante Dios y Dios perdonó el pecado de David (2 Sam. 12: 13-14; 24: 10-17), y sin embargo, sufrió el castigo por su pecado. ¿Por qué?
Se le pidió a David que construyera un altar y ofreciera sacrificio en la propiedad de otro hombre. A David se le ofreció la propiedad y los animales para el sacrificio de forma gratuita. David rechazó la oferta. No ofrecería a Dios ningún sacrificio que no le costara nada (2 Sam. 24: 24-25). ¿Por qué?
Queda alguna deuda con la justicia Divina que debe ser cancelada ahora o más adelante (Purgatorio). La penitencia es el pago de la pena temporal debida a causa de la ofensa cometida contra Dios. Es un acto de reparación requerido para satisfacer el daño hecho al honor de Dios y para restaurar nuestra relación con Dios (1 Corintios 11:32). Es una señal de dolor por nuestro pecado, nuestro amor por Dios y nuestro deseo de hacer las paces con Dios (1 Rey. 21: 27-29; 2 Rey. 22:19). Es también un remedio preventivo destinado a impedir cualquier ruptura posterior de esa relación. CIC 1459.
¿Por qué esta Penitencia? El concilio de Trento reiteró la creencia y práctica tradicional de que se debe imponer la penitencia. Su entrega es obligación del confesor. La penitencia suele adoptar la forma de ciertas oraciones que el penitente debe decir o de ciertas acciones que el penitente debe realizar, es decir, visitar una iglesia, ayunar, dar limosnas, etc. La naturaleza y el alcance de la penitencia están determinados por la confesor de acuerdo con la naturaleza de los pecados, las circunstancias únicas del pecador, la probabilidad de reincidencia y la necesidad de erradicar los malos hábitos. CCC 1460. En algunos casos, los actos penitenciales pueden tener lugar durante un período de tiempo. Sin embargo, esto no impide que el penitente reciba mientras tanto cualquier otro sacramento, ya que la absolución restaura al penitente al estado de gracia. Y, sin embargo, el penitente todavía está obligado a completar la penitencia. ¡QUE ESTEMOS BIEN CON DIOS Y CON EL PRÓJIMO (Las 10 Palabras)!
RECURSOS: Respuestas Católicas y New Advent MAC Y MARCIA