Reflexiones Semanales del 11 de Septiembre de 2022
“Maestro de fe”
Si alguien te preguntara: “¿Quién es el maestro de la fe?” – probablemente responderías – “Jesús” y estarías en lo correcto. Durante Su ministerio, Jesús deja en claro que Él no está aquí para cambiar la ley sino para profundizar nuestra comprensión de la ley. A través de sus parábolas, enfatizó la importancia del cuidado de los enfermos, las viudas y los huérfanos. Nos ayudó a comprender que Dios Padre conoce las intenciones de nuestro corazón de que practiquemos la justicia, la fe y la misericordia.
El dilema en el mundo de hoy es que no podemos ver y escuchar a Jesús cara a cara. Él no está físicamente con nosotros. Entonces, ¿quién se convierte en el maestro de la fe ahora? La respuesta es: Nos convertimos en los maestros de la fe. Tenemos una guía curricular impresionante, la Biblia, para enseñar a otros a vivir como Jesús enseñó. Escuchamos las lecturas/homilía en cada Misa. Sabemos lo que significa “SER” un seguidor de Cristo.
Mamás, papás, abuelos, padrinos son nuestros primeros maestros de fe. Más tarde hay maestros, catequistas y otros líderes de la iglesia que nos ayudan a guiarnos en nuestro camino espiritual. Enseñar a otros es un trabajo para todos los católicos al hacer las cosas cotidianas de manera extraordinaria, como sonreír al extraño con el que nos cruzamos en la calle, dejar que alguien se nos adelante cuando estamos parados en la fila o conduciendo por la carretera, decir una oración para el vendedor enojado que acaba de atendernos. ¡La lista podría continuar para siempre!
Estas acciones nos ayudan a ser mejores cristianos ya su vez mejores personas. Un recordatorio importante: las acciones deben realizarse por la razón correcta. ¿Cómo? Esto se logra haciendo las cosas ordinarias de manera extraordinaria con amor, justicia y misericordia. Ah, y no olvides que Jesús oraba todos los días para convertirse en un gran maestro. ¿Estamos siguiendo su ejemplo? ¿Estamos tomando en serio el final de cada misa cuando se nos encomienda salir y predicar el evangelio para amarnos y servirnos unos a otros?
Angie Rebbert