Reflexiones para el 5/11/2023

“Libro del Recuerdo”

“Amigos, me acordaré de vosotros, pensaré en vosotros, oraré por vosotros; y cuando pase otro día, seguiré siendo tu amigo…” John Denver

Durante el mes de noviembre, la Iglesia nos llama a recordar de manera especial a todos los que han fallecido. El 1 de noviembre es la fiesta de Todos los Santos. Un santo es alguien que ha obtenido el objetivo final de todo cristiano: la ciudadanía celestial. Los santos vivieron vidas dignas de imitación y pueden interceder por nosotros ante Dios ya que están presentes con él en el cielo.

El 2 de noviembre es la fiesta de Todos los Difuntos. Este es el día que recordamos de manera especial y oramos por las almas de todos aquellos que han muerto pero que aún no han llegado al cielo. La Iglesia enseña que si una persona muere sin recibir la absolución, puede pasar algún tiempo en el Purgatorio antes de ser admitida al cielo. De esta manera, la persona es “purgada” del pecado.

La comunión de los santos incluye a aquellos de nosotros que estamos en la tierra, los santos en el cielo y las almas en el purgatorio. Los santos pueden orar por nosotros y nosotros podemos orar por los que están en el purgatorio. Nuestras oraciones pueden ayudar a acelerar el camino de estas almas al cielo.

Durante el mes de noviembre, se coloca un Libro del Recuerdo cerca del altar en el centro de adoración. Este libro contiene los nombres de nuestros seres queridos que han fallecido en esta vida. Escribir los nombres de nuestros seres queridos en este libro es una manera maravillosa de recordarlos. A lo largo del mes, se rezará en todas las Misas por aquellos cuyos nombres están escritos en el Libro del Recuerdo; y la presencia del Libro es un recordatorio visual para todos nosotros de continuar manteniendo a estas amadas almas en oración.

Concédeles el descanso eterno, oh Señor; y brille para ellos la luz perpetua.

Que las almas de todos los fieles difuntos, por la misericordia de Dios, descansen en paz. Amén

  • Kathleen Foehrkolb