Reflexiones Semanales del 23 de Octubre de 2022

“Dios en la naturaleza”

¿Alguna vez has creado algo? ¿Quizás un dibujo, un poema, una manualidad o una tarjeta de felicitación hecha a mano? Si es así, conoces la sensación de poner algo de ti mismo en esa creación. Conoces el sentimiento de querer traer alegría a otras personas cuando compartes tu creación con ellos.

Como cristianos católicos, creemos que Dios creó todo en el mundo natural. el sol y la luna y las estrellas; la tierra y la hierba y las flores; los insectos y los animales y cada persona individual. Y como nosotros, Dios pone algo de sí mismo en cada cosa que crea. Entonces, una forma de conocer mejor a Dios es contemplar y experimentar su creación.

Cuando miramos al cielo y consideramos la inmensidad del universo, podemos hacernos una idea de la enormidad de Dios. Cuando observamos la variedad y belleza de las flores, podemos hacernos una idea del genio creativo de Dios. Cuando experimentamos la fuerza de una tormenta, podemos hacernos una idea del poder que posee Dios. Cuando vemos a las ardillas corretear arriba y abajo de los árboles, podemos hacernos una idea de la alegría y la alegría de la naturaleza de Dios. Cuando pensamos en el equilibrio de la naturaleza y cómo cada ser vivo juega un papel en la existencia continua de otros seres vivos, podemos hacernos una idea de cómo el conocimiento y la sabiduría de Dios superan con creces los nuestros.

A medida que avanzamos en la temporada de otoño, se nos brinda una increíble oportunidad de experimentar y contemplar a nuestro maravilloso y amoroso Dios en la naturaleza. Hagamos un esfuerzo para pasar unos minutos al aire libre esta semana, sumergiéndonos en la belleza que nos rodea y permitiendo que nos revele la naturaleza del Dios que lo hizo todo.