Escritorio del diácono 20/10/23

Queridos Amigos:
Hoy escuchamos del libro de Éxodo 22:20-26 y del Evangelio de Mateo 22:34-40. El Éxodo es parte de la enseñanza judía llamada Torá. La Torá son los primeros cinco libros de las Biblias hebrea y cristiana. Cuando Jesús cita hoy su respuesta a los fariseos en Mateo, cita Deuteronomio 6:5 y Levítico 19:18. Esto es extremadamente importante porque Jesús está tratando de transmitirles que la ley que enseña no es nada nuevo. Es lo que el Padre quiso desde el principio; eso es amarnos y cuidarnos unos a otros y amar a Dios con todo lo que tenemos. En algún momento del camino, los líderes judíos perdieron el mensaje que les había dado su propia literatura gobernante. De algún modo se perdieron y olvidaron que la ley fue escrita para la humanidad. No fue escrito para convertirse en una carga para las personas ni para excluir a nadie del amor de Dios.
Creo que a veces también perdemos el rumbo. A veces perdemos el camino de amar como ama Dios. Nuestro mundo y nuestra cultura nos enseñan a cuidar de nosotros mismos primero y preocuparnos por los demás después. Desafortunadamente, lo que encontramos cuando vivimos de esta manera es una gran cantidad de dolor, sufrimiento y tristeza. Dios nunca tuvo la intención de que los judíos o nosotros viviéramos como lo hacemos.
Quizás esta semana podamos tomarnos uno o dos momentos para leer una vez más el Evangelio de Mateo 22:34-40. Son sólo seis versículos pero esos versículos, que se remontan al principio, nos enseñan cómo vivir. ¡Después de todos estos años todavía no hemos perdido lo que significa amar de verdad! Sólo tenemos que mirar un poco más detenidamente.
¡Paz y todo bien!
Diácono Jim